Entrevista a los 23, en 2005
Juanita Viale, chica mala
Este año, a los 23, Juanita Viale ganó fama en TV por su actuación en Doble vida, una historia prostibularia, más bien efectista, con episodios sexuales múltiples y de dudosa calidad. Allí, Juanita tuvo fuertes escenas de cama con hombres y otras de besos con mujeres. ¿Cómo es esta chica que tiene una hija de 2 años, está de novia con un actor chileno y dice que la popularidad la intimida?
Cierto que las velas servían para los cortes de luz. Y también estas, que nacieron para adornar las mesas, ahora pueden cumplir la misma función que sus primas pálidas y ordinarias. Suerte, porque la mañana está muy oscura, con las cámaras de los canales de televisión clavadas en la avenida Libertador, la misma que pasa por acá en la esquina.
Hace un día que la lluvia no para, y puede ser que se inunde. Sin luz se veía muy poco en este bar con nombre de fábrica de pastas, y distinguido a la vez; nada de nada se veía en esta mesa recóndita, a prueba de curiosos.
Por eso hizo muy bien la chica famosa de la mesa recóndita en pedir unas velas; “velitas”, como ella les dice.
Pero en un rato –fin del encantamiento –, adiós corte, y con la luz arranca como un trueno la máquina de café, y la clienta famosa va entonces presurosa por su lágrima, y por su segundo jugo de naranja. Fuma, había dejado y va a dejar, promete. Antes la sospechábamos en las penumbras, ahora la vemos: las cejas bien trazadas, el aro impar, el colgante con aires africanos que habita el escote arriesgado y llamador; su presencia de bonita universitaria arreglada, algo de eso que ahora llaman hippie chic .
Ni siquiera la nieta: la nietita . Para el público de la abuela siempre va a ser eso, se queja. Pero ahora ella tiene público propio. Y nombre propio, también: Juana Viale.
Juanita.
No es que sea antipática, Juanita, no. Pero la sonrisa de mamá, la de la abuela, esa garantía de fábrica, se hará desear.
Chica tímida
¿Nació para ser famosa? ¿Era inevitable?
Bueno, al principio no me sentía apta para seguir con la herencia familiar. No lo había descubierto. Ahora sí, pero todavía soy bastante tímida para la masividad. La popularidad me intimida bastante.
Tendrá que acostumbrarse: es el crédito más reciente de un clan con abuela poderosa –la señora Mirtha Legrand, reina madre sin corona real, pero casi–; abuelo famoso (Daniel Tinayre, cineasta), y una mamá de la tele (Marcela Tinayre, conductora), para Completar
Qué familia la suya, ¿no?
Qué familia. Toda la vida se la ha visto como esa cosa perfecta, que siempre se ha mostrado desde el empeño laboral. Hasta que un día vine yo. Qué lindo.
Qué lindo. ¿Y qué pasó?
Vine yo, que soy más frontal. Más realista y más... gasolera. Hay gente que presupone que como mi familia tiene plata, entonces yo tengo que tener tales o cuáles actitudes. O tales condiciones de vida. Podría tenerlas, pero elijo otras cosas.
¿Cuáles?
Ahorrar, por ejemplo. No necesito lo que necesita mi abuela para vivir. No le niego el tapado de piel. No se lo niego. Pero yo soy casi ecologista. Prefiero hacer un viaje. Y me voy con una mochila al hombro. Ojo, no digo que no me gusta un 5 estrellas. Pero un lugar económico me llena más. No era malo el plan. Ser escultora, ir a estudiar a la Universidad Complutense de Madrid.
Se empezó a preparar y todo. Pero la otra vida siempre iba a estar al acecho. Y atacó. No se puede ser la nieta y la hija con tanta facilidad.
Así que Juana –primer impacto– apareció juvenil, bonita y descamisada en una producción fotográfica. Pero también empezó a estudiar teatro. Fueron dos años, y pudo seguir. Estaba haciendo su primera tira, C ostumbres Argentinas , con horarios tiranos. Pero eso no es nada: hacía dos meses había sido mamá.
Tan joven. Ahora Juana tiene 23. Otro pucho.Ya dejó una vez, va a dejar. Ese pelo largo rebelde envía mensajes. Y ese lunar en la mejilla.
No soy yo
Este año fue cobrando protagonismo en un programa que arrancó a toda expectativa pero está llegando al final con un rating que ronda los 4 puntos. El hilo policial de Doble vida corrió a la sombra de una historia prostibularia, más bien efectista, con episodios sexuales múltiples y delirantes juegos de traiciones. En esa trama, Juanita tuvo fuertes escenas de cama con compañía masculina. Y, también escenas de besos con otras mujeres. Amén de la calidad del ciclo (dudosa, por cierto), fue suficiente para abonar la idea de Juanita como bomba sexy. ¿Se lo cree? No.
Se mira un instante. Concluye: “No tengo con qué”.
¿Dudó cuando le propusieron hacer esas escenas fuertes? ¿Fue difícil?
Más difícil es emocionarse en escena. Llegar a puntos límites. Quedarse sin ropa con un compañero no es lo más fácil. Pero como la tevé busca llegar como sea, me tocó hacer eso. Pero ahí lo que se ve es a Juana Viale interpretando un papel. De eso a mi realidad hay un abismo.
¿Y qué dijo la abuela de todo esto?
Entiendo a mi abuela si no le gustan. Es de otro tipo de TV, de otro trato con el público.
Dice Juanita que en la calle se le acercan mucho los chicos, “los niños”, como les dice. Pero cuando la gente se codea –palabra de ella– se quiere matar.
¿No es mucho?
Bueno, todo bien con la gente. Pero eso del codeo me molesta. Quieren ser disimulados sin serlo. Me molesta mucho. No hará Juanita de la prescindencia un mérito.Pero no llamen para lo que no quiere ser llamada. No hará el esfuerzo.
¿Cuál es el criterio para elegir las cosas que hace y las que deja a un lado?
En general, hago las cosas que me apasionan o me interesan. No encuentro satisfacción, por ejemplo, en hacer deporte encerrada. Encerrarme para tener la panza más chata... no entiendo a la gente que corre en un máquina frente a un televisor durante 7 kilómetros.
Anda en un Fiat 600. No mira televisión. La nieta de Mirtha Legrand y Daniel Tinayre, la hija de Marcela Tinayre y el publicista Ignacio Viale del Carril, tiene esas cosas.
El Fitito es amarillo, impecable: si lo tendrán detectado los fotógrafos que le siguen la rutina callejera. Eso que tanto la enfada. La tele de la casa de Juanita, un departamento a una cuadra del Botánico, es apenas un monitor conectado al aparato de DVD. En la casa de Juanita no hay televisión.
Una extravagancia ¿o no?
No soy amante de la tele. Desde que nació la nena no tenemos tele en casa. Hay una generación que todavía está en la tierra que cuando era joven no miraba televisión. Para los chicos hay un montón de cosas... juegos didácticos, la música, pintar, títeres, mil alternativas más saludables. Mi hija no tiene esa costumbre, y por lo menos si la toma de más grande, que sepa que tuvo una parte de su vida sin eso.
La hija
Ambar, la nena, tiene 2 años. El papá es Juan de Benedictis, el hijo de Piero, el cantante.
El último cumpleaños de la nena generó una verdadera comedia mediática: acusaban a la mamá de haber pasado el día trabajando. La acusada se defiende: “No fue así. No era el día del cumpleaños; era el del festejo. Yo estaba trabajando en Ezeiza y no podía parar la grabación y hacer dedo para volver”.
A Marcos Gastaldi, el marido de Marcela Tinayre, su mamá, loreclamaba la Justicia. Y un día las cámaras lo descubrieron en un auto donde también iba Juanita. Ella reaccionó enardecida, con una bravata (y alguna que otra palabra fuerte) frente a las cámaras.
Quizá fue a partir de ese episodio que se empezó a construir a su alrededor una imagen de chica implacable, de pocas pulgas.
¿Qué imagen de Juana Viale es la que predomina entre la gente?
La imagen no siempre la construye una. También se la construyen. Soy humana, tengo buen humor, mal humor. Con las cosas que no tolero reacciono de tales o cuáles maneras. A la gente a veces le cae bien y a veces no, pero no me creo un demonio.
¿Alguien se lo reprochó?
No sé, pero predomina una imagen de mina soberbia, mala onda, insensible. Parece que soy tremenda. Igual no estoy pendiente de eso. Quien se toma el trabajo de conocerme, me llega a conocer.
Estos juicios, o las persecuciones fotográficas, ¿no son un precio que los famosos saben que tienen que pagar?
Pero no es equitativo. Sé que trabajo en un medio público, pero no veo la necesidad de la intromisión.
Me altera mucho saber que tengo un auto siguiéndome. No puedo andar libremente por el país donde vivo. No termino de acostumbrarme. Si voy al cine, dicen: “Juanita fue al cine”. ¡Si todo el mundo va! Es desmedido. Para llevar a Juana a un terreno más plácido, hay que conversar sobre libros. Dice que en su mesa de luz hay pilas, y siempre hay un par viajando en la mochila roja y negra, bien de fajina, que esta chica usa para andar por la calle.
¿Qué lee?
Acabo de terminar Los Justos , de Camus, una obra de teatro. Me gustan los libros, escribirlos, marcarlos, copiar partes a un cuaderno. Hace poco leí Seda , de (Alessandro) Baricco. Los libros te acercan frases para la vida, o para un personaje. Son muy nutrientes para la cabeza.
Es posible que en los libros viva la heroína a medida para Juanita Viale. Podemos proponer a Josefina Peguy, la inquieta mujer que el uruguayo Tomás de Mattos eligió como narradora principal de su novela ¡Bernabé! ¡Bernabé! Dama del siglo XIX, pese a la buena cuna, Josefina había renunciado a las ostentaciones materiales en nombre de los libros, las plantas y –sobre todo– sus pesquisas sobre la posible razón última de nuestra presencia en el mundo .
Juana, dice, quisiera conocer a Madonna.
¿Es su heroína?
Es una mujer superluchadora, que empezó con la nada misma, tocando la batería en la banda de su novio, y luchó para llegar. Hoy escribe libros para chicos y es la más grossa del pop.
En el bar que supo estar encantado de velitas, Juanita juega de local. Vino caminando y todo. ¿ Como vai ?, saluda a una señora que le pregunta familiarmente por la mamá. Juana se levanta un momento y ahí podemos aprovechar para verla de jeans y cuerpo entero. No es dueña de una figura tallada por los ángeles. Es un linda chica en envase normal.
Pero hay algo en esa mirada levemente evasiva. Y en la sonrisa amplia: nos convidará un par de ediciones durante el resto de la charla.
Ya dijo que es una chica gasolera y dirá ahora que es una mujer trabajadora : “Tengo una base de mi familia, pero me banco a mi misma, mi vida, mi obra social, todo me lo pago yo”.
Juanita se dispone a tomarse un descanso después de un año con mucho trabajo. Las grabaciones de Doble Vida llegaron a demandarle trece horas diarias.
Ahora tendrá tiempo para seguir con su cursillo informal de música clásica, a cargo de un amigo especialista en la materia. “Me dice ‘escuchá cómo el violín le contesta al contrabajo’, y yo estoy cuatro horas escuchando”.
Un excelente alumna.
Y, porque.... Bach... por ahí lo ponés y lo sacás porque no entendés nada. Pero si tenés a alguien que te vaya guiando, es para las lágrimas directamente.
A Juana también le gusta el punk, Tribalistas, Tracy Chapman, Yellowman: “Son estados de ánimo. Estados de música”.
¿Cine?
Cine, cine, cine... hace mucho que no voy al cine. La última fue Melinda & Melinda , la de Woody Allen, que me pareció patética, muy mala. Me llamó la atención que fuera de él. Hace poco, en DVD, vi La Marcha del Emperador (documental de Luc Jacquet). Es fascinante ver como se van juntando los pingüinos, hasta que tienen las crías y se van.
¿La conmueven los animales?
Me encantan.
¿Es de perrito faldero?
Noooo, yo soy del perrrrrro. Que se suba al sillón, pero después, perro, afuera. Tratarlos como animales. No me gustan esos perritos chiquititos. Tienen una tensión extra que... no sé.
El sueño de Juanita es trabajar en cine: “Focalizarme en eso. Hacer la mayor cantidad de personajes posibles, probar, intentar”. Tuvo una propuesta para hacer teatro, pero la rechazó porque no le gustaba el libro.
Dicen que es una actriz cara. ¿Es verdad?
Si hay algo que me gusta mucho, no me importa tanto plata.
¿Cómo es el ambiente de la televisión? ¿Mucha vanidad?
Hay mucha competencia interna. Muchos terminan de trabajar y se van a la casa. Yo con los técnicos, los cámaras y los sonidistas tengo buena onda. Con los actores, con unos sí y con otros no.
Pero consiguió algunos novios actores.
Bueno, una no sólo se relaciona con la gente del medio. Pero es cierto que conoce más gente ahí.
El último es Gonzalo Valenzuela, su compañero en Doble vida . ¿No le gusta hablar de esto, no?
Nos gusta preservarnos. Con estas cosas te desnudan tanto que es como que si te sacaran escamas.
Pero vamos bien.
Desde chica, Juana tuvo novios del ambiente. Oficiales y de los otros. El primero fue el modelo Iván de Pineda En 1999, gran impacto por unas fotos en Punta del Este con Alé de Basseville, playboy francés, decididamente mayorcito para ella. Juan Cruz Bordeu, desmentido. Con Juan de Benedictis, Juana fue madre. Tomás Fonzi fue otro de los novios aceptados en público.
Entre los méritos de Juanita está su predisposición al trabajo. Ella no se queja aunque tenga que hacer sacrificios como sacarse fotos abajo del agua y con los ojos abiertos. Así la vemos en la campaña de Vitamina , como un sirena vestida nadando entre hipocampos. Si la marca vende ropa joven , sensual y desestructurada ¿hace falta aclarar por qué convocó a Juana Viale para meterse en la pileta?
El año se termina y Juanita quiere recuperar el tiempo. Meterse en su departamento, con Ambar, con sus libros apilados
¿Es muy casera?
Muy. Mis amigas me dicen abuela . La abuela soy yo.
“Mi abuela Mirtha Legrand me ayuda mucho”
La única guerra desatada entre Mirtha Legrand y Juanita Viale –revela la nieta– tiene lugar cada verano en la casa de la abuela en Punta del Este. Ahí las dos se sacan los ojos por la Claringrilla. Gana, claro, la que se levanta más temprano.
“Mi abuela –dice Juana– me ayuda mucho. Tiene muchos años en el medio. Y yo soy muy ingenua y confiada. Así que apelo a su sentido común para decidir. No tanto sobre los proyectos, sino sobre las personas que están involucradas”. El clan tiene un funcionamiento activo: el punto de encuentro de las tres generaciones es la casa de Marcela Tinayre.
Mirtha va prácticamente todos los días a ver a su nieto Rocco, y ahí cae Juanita con Ambar. Juana asegura que la relación con su madre es ideal: “Somos muy compañeras, muy amigas, muy unidas”. No quita que de vez en cuando tengan algún entredicho: “Las tres somos mujeres temperamentales, con diferentes gustos. Defendemos lo nuestro”, dice Juanita.
La nieta reconoce que casi nunca vio los famosos almuerzos de la abuela. Ahora porque no tiene televisión en la casa. Y antes, porque iba a doble escolaridad y al mediodía estaba en el colegio. Este año hasta le hizo un desplante a un notero que quiso sacarla al aire en el programa que Mirtha tiene a la tarde por la radio La Red.
Mirtha sí que ve a la nieta cuando actúa . Y decididamente no le gustan las escenas sexuales o eróticas de mayor voltaje. Pero la elogia como actriz. “Creo que va a hacer una buena carrera. Actúa distinto, no hace un gesto de más, es muy personal”, dijo la abuela en agosto, en un reportaje concedido a Clarín.
Si me dan a elegir
¿Una actriz de acá?
Valentina Bassi.
¿Una de afuera?
Audrey Tautou, la actriz de Amèlie. Y Dakota Fanning.
¿Una actor argentino?
Jorge Marrale.
¿Uno del exterior?
Sean Penn.
¿Un perfume?
De té verde, supersuave, que no tape la personalidad.
¿Un personaje que le gustaría conocer?
Ernesto Sabato.
¿Un libro?
El Perfume, de Patrick Süskind.
¿Y un clásico?
Crimen y Castigo.
¿Un sueño?
Hacer cine.
¿Asado o comida étnica?
Asado. Pero si es muy zapatilloso, comida étnica. Bueno contra bueno, asado.
¿Cine o DVD?
Y... una se acostumbra a la comodidad.
¿Un lugar romántico?
La playa, al atardecer... pero puede ser la terraza de mi casa, también. Hay muchos lugares.
Neita de Mirtha Legrand e hija de Marcela Tinayre, Juanita Viale se va haciendo un lugar como actriz en la televisión argentina. La estrella de Malparida hace un culto a su vida privada, al contrario de su personaje en la tira, una joven sin límites.
“No me planteaba ser actriz. Decía que iba a ser veterinaria y quería estudiar escenografía, Bellas Artes, Filosofía. Empecé con Historia del Arte y abandoné porque quedé embarazada y los primeros meses me sentía muy mal físicamente. Y lo de la actuación se dio como un juego. Ya estaba embarazadísima de Ambar y Marcelo Tinelli me propuso actuar en tele, le dije que no. Parí, insistió. Me quería para Costumbres argentinas", recuerda sobre sus comienzos.
"A esa altura ya estudiaba teatro. Finalmente arreglamos por 20 capítulos y al principio se me hizo cuesta arriba... Era un programa con muchos chicos de mi edad, otros más grandes. La pasaba bien con algunos y con otros no tanto y sentía que había gente ahí que no quería que yo estuviera. Nunca se lo dije a Marcelo, pero cuando se estaba por cumplir el plazo me preguntó y le dije ‘me quedo’. Fue como una especie de ‘el bien triunfará’. No di el brazo a torcer... Y hoy protagonizo Malparida", agrega Juanita.
¿Cómo afronta la tira? "Cuando Carnevale me planteó la idea le dije ‘¿Tira? no me la presentes, no me interesa’ . La historia me parecía maravillosa, pero me trababan los tiempos. Estaba con ganas de volver a la tele... El año pasado filmé Las viudas de los jueves y La patria equivocada , que aún no se estrenó. ¿Y qué cambió paar que aceptara? "La buena relación con Pol-ka, el buen diálogo. Me parecía un proyecto que me exigía un montón, me sentía capaz de hacerlo. Y lo bien que hice, porque me entretiene mucho hacerlo, el grupo de laburo es increíble. Hay mucha alegría
BUENOS AIRES, April 25, 2011.- Juanita Viale spoke about the controversial video that shows her kissing former Economy Minister Martin Lousteau, through a letter sent to the media.
“It’s very difficult to say something at this time as the grief and pain predominate these days. About the very discussed fact I will not say anything, because it belongs to my private life but I wish to refer to certain issues, because I feel obliged to do so as I was who made the mistake and my family is exposed.
I am quite aware of the magnitude of the facts, as a woman, mother and daughter. I do not usually talk about my private life but circumstances force me to do it, for my family and because people are saying things that lead to inaccurate conclusions or statements that are not true.
We will solve this issue behind closed doors. It is an extremely painful fact and only I will protect my children and my husband.
I understand the interest and eagerness of the media to get news about my family these days, but I would ask please let us live this moment alone.
And please understand that there are two young children who do not have to be involved in matters of this nature. Gonzalo is immersed in this episode without having caused any situation.
That’s why we need to be alone, thinking alone, and not add one more concern, arising from judgments, and news and information that are not true.
Again, I absolutely am in charge of what happened and no one else is responsible for the facts.
Thanks
Juana Viale “
Nieta de Mirtha Legrand e hija de Marcela Tinayre, Juanita Viale se va haciendo un lugar como actriz en la televisión argentina. La estrella de Malparida hace un culto a su vida privada, al contrario de su personaje en la tira, una joven sin límites.
“No me planteaba ser actriz. Decía que iba a ser veterinaria y quería estudiar escenografía, Bellas Artes, Filosofía. Empecé con Historia del Arte y abandoné porque quedé embarazada y los primeros meses me sentía muy mal físicamente. Y lo de la actuación se dio como un juego. Ya estaba embarazadísima de Ambar y Marcelo Tinelli me propuso actuar en tele, le dije que no. Parí, insistió. Me quería para Costumbres argentinas", recuerda sobre sus comienzos.
"A esa altura ya estudiaba teatro. Finalmente arreglamos por 20 capítulos y al principio se me hizo cuesta arriba... Era un programa con muchos chicos de mi edad, otros más grandes. La pasaba bien con algunos y con otros no tanto y sentía que había gente ahí que no quería que yo estuviera. Nunca se lo dije a Marcelo, pero cuando se estaba por cumplir el plazo me preguntó y le dije ‘me quedo’. Fue como una especie de ‘el bien triunfará’. No di el brazo a torcer... Y hoy protagonizo Malparida", agrega Juanita.
¿Cómo afronta la tira? "Cuando Carnevale me planteó la idea le dije ‘¿Tira? no me la presentes, no me interesa’ . La historia me parecía maravillosa, pero me trababan los tiempos. Estaba con ganas de volver a la tele... El año pasado filmé Las viudas de los jueves y La patria equivocada , que aún no se estrenó. ¿Y qué cambió paar que aceptara? "La buena relación con Pol-ka, el buen diálogo. Me parecía un proyecto que me exigía un montón, me sentía capaz de hacerlo. Y lo bien que hice, porque me entretiene mucho hacerlo, el grupo de laburo es increíble. Hay mucha alegría
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