Messi y el perdonazo incerible de FIFA: Chile, ojo con los tres puntos

En el oficio de la apelación aparecía el nombre de Lionel Messi. Temblaron todos. No se podía fallar. Se caía el Mundial. Los rusos y los abogados encargados del recurso estaban aterrados. La FIFA miraba de frente,otra vez a disposición de una “buena causa”. El sponsor del jugador, el mismo del Mundial, sufría con posibles pérdidas. Todos involucrados. Cualquier fórmula utilizable era valida para declarar la inocencia. “No hubo pruebas concluyentes”, gritaron al mundo. Penoso.
Su castigo, entregado por la Comisión Disciplinaria de la FIFA, era de cuatro partidos por garabatear al juez asistente Emerson do Carvalho. Sanción justa. Había pruebas. Videos en primer plano. Audios al borde del campo. Messi era culpable. Sin embargo, todo cambió. El viernes 5 de mayo los profesionales de la FIFA señalaron sin ninguna vergüenza y con mucha convicción que “no había falta grave”. Exculpado,sin pena. Messi está libre. Si el informe hubiera tenido el apellido de Bravo o Sánchez, el castigo es sin llorar… Lo hicieron con Medel, con Vargas y con Valdivia. No serán los mejores del mundo, pero requieren igualdad ante la ley.A la FIFA no le importa, lo único que les incumbe es que Messi esté en el Mundial. Esa es la verdad. Si Argentina no está en Rusia el negocio se les cae. No hay venta de camisetas, no hay led iluminados con la foto de Lio y los millones de euros disminuyen considerablemente. Papelón.
El viernes 26 de febrero del año 2016 enfrentó al mundo como presidente. Terno azul oscuro, camisa blanca y corbata celeste. En un momento de su primer discurso cerró los ojos, se puso su mano en el corazón y dijo: “Vamos a restaurar la imagen de la FIFA”. Era Gianni Infantino. Se terminaba la oscuridad de Blatter y se veía la luz al final del túnel. JAJAJA. Después de un año, todo sigue bajo la misma mierda. Ternos diferentes, más sonrisa, voz más amigable, pero el excremento aún flota. No cambió nada.
Era el momento para enviar una señal potente y hacen todo lo contrario. Utilizan al mejor del mundo para su conveniencia. No tengo nada en contra de la selección argentina ni tampoco contra Messi, jugador al que admiro más que a Cristiano Ronaldo. Me revelo ante la mentira de estos personajes. En un par de meses hemos visto arbitrajes horrendos favoreciendo a Barcelona y Real Madrid en la Champions y ahora aparecen vociferando la inocencia de Lio. La FIFA cree que la gente es imbécil. Cambian las caras pero la suciedad duerme con ellos.

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Con este episodio se reafirma mi temor. Los tres puntos,que recibimos por la mala inscripción de Bolivia se nos podrían quitar si es que Argentina está fuera del Mundial. Hasta que no salga la ratificación oficial, con timbre de agua y sin derecho a otra reclamación, prefiero pensar que Chile debe clasificar al mundial sin contar esas 3 unidades. Si ayudaron a Messi de esta forma, tengo todo el derecho a pensar que esos 3 puntos desaparecerán mágicamente.No me extrañaría que si Argentina está colgando del avión, le den un gran empujón y nos bajen a nosotros.