Pese a que el triunfo de la centroizquierda argentina abre cierta esperanza para sus pares en Chile, desde el bloque dicen que la situación trasandina no es comparable a la local y que aún falta para buscar una figura que pueda lograr la unidad.
13 de Agosto de 2019 | 08:00 | Por Felipe Vargas Morales
De acuerdo a los expertos, aún es difícil encontrar una figura con las características de Fernández en Chile. EFE.
SANTIAGO.- Se sabía que iba a existir cierta diferencia a favor, pero no tan holgada. Los casi 15 puntos de ventaja que logró el candidato presidencial del kirchnerismo, Alberto Fernández, frente al actual líder de Argentina, Mauricio Macri, en las elecciones primarias de este fin de semana, llamaron la atención de todo el mundo y particularmente en Chile. No solo por sus consecuencias económicas, que ya durante toda la jornada de ayer se hicieron sentir al otro lado de la cordillera, sino que también por sus efectos políticos, al consolidarse la idea del regreso de Cristina Fernández de Kirchner a la Casa Rosada como vicepresidenta, y con ello la vuelta de la centroizquierda argentina al poder.
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Para muchos, aunque guardando las distancias, la influencia que mantiene la figura de la "Señora K" en la política trasandina es solo equiparable a la que logró forjar tras dos mandatos la ex Presidenta Michelle Bachelet, cuya sombra aún permanece sobre la ex Nueva Mayoría y sus eventuales sucesores. Sin ir más allá, la actual Alta Comisionada para los DD.HH. de la ONU sigue apareciendo en encuestas como la principal carta presidenciable de ese bloque, evidenciando la falta de liderazgos en el sector. En ese contexto, la experiencia argentina de levantar a una figura como Alberto Fernández es mirada con atención desde Chile. La similitud de la situación argentina con la chilena abre cierta esperanza en la ex NM, pero desde ya advierten que no es homologable, pese a que la llegada de Macri al poder fue similar a la del Presidente Sebastián Piñera en 2017, -prometiendo un crecimiento económico que ha sido infructuoso-, y el ejemplo de unidad dado por el kirchnerismo. No obstante, el alcalde de Recoleta y presidenciable del PC, Daniel Jadue, hizo patente la idea, asegurando a través de Twitter que "el fracaso absoluto de la derecha neoliberal en Argentina los llevó a una derrota electoral aplastante. Ojalá sigamos el ejemplo y logremos la unidad más amplia para seguir transformando Chile". La mirada de los líderes de la ex NM Consultado sobre si se puede extraer alguna lección de lo ocurrido en el país vecino, el presidente del PPD, Heraldo Muñoz, señaló que “la situación de Chile es distinta a la de Argentina en términos políticos y de fuerzas políticas, yo creo que acá estamos recién mirando a las elecciones municipales y de gobernadores regionales”. "Entonces yo no me anticiparía a decir que si o que no es similar. Es un panorama abierto", añadió, junto con descartar que exista una figura como Fernández en la actual oposición. "Es muy distinto, porque él es parte de un peronismo distinto a lo que era el kirchnerismo y sin embargo, se alía con la ex Presidenta de Argentina", recordó.
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"No es comparable el arco de partidos políticos de Argentina con lo que hoy existe en Chile. Así que no veo una situación semejante, tenemos que esperar a que se desarrolle la situación de nuestro país y yo diría que estamos en la etapa de puntapié inicial para las presidenciales, así que no hay que sacar conclusiones porque falta mucho tiempo", dijo. Una visión similar planteó el líder del PR, Carlos Maldonado, quien señaló que "son realidades distintas, nosotros no necesitamos ver lo que pase en Argentina para tener la firme voluntad de disputar el poder local el 2020 y nacional el 2021. Como centroizquierda, estamos trabajando seriamente para presentar una alternativa que nos devuelva la confianza ciudadana como la hemos tenido en la mayor parte de las últimas décadas". Según el timonel radical, la idea es que "podamos volver a gobernar con un proyecto claro que conjugue crecimiento económico con justicia social. Esa es nuestra apuesta, ese es nuestro trabajo y para allá vamos. Ahora, lo que pasa en Argentina es una muestra clara de la influencia de la situación económica en los resultados electorales". En cuanto a si hay un Alberto Fernández en Chile, indicó que "habrá figuras, nosotros hemos señalado claramente que vamos a hacer primarias. El 2017 no las hicimos y fue un grave error, la ciudadanía quiere definir los liderazgos (…) donde se pronuncie surgirá el liderazgo que encarne esa expectativa de producir un cambio y recuperar el gobierno”. En tanto, el timonel del PS, Álvaro Elizalde, destacó que "la principal causa de este mal resultado para el oficialismo argentino es la situación económica. Macri se comprometió en campaña, al igual que el Presidente Piñera, a generar un crecimiento sostenido de la economía y los resultados están siendo malos, más que en Chile, hay que decirlo". En esa línea, destacó que esa situación "da cuenta de que cuando los presidentes no cumplen en su mandato lo que comprometieron, obviamente la ciudadanía apuesta por opciones distintas y ese es el desafío que tenemos por delante, porque la economía está andando mal y el Gobierno no está cumpliendo sus compromisos de campaña”. "Ante eso necesitamos construir una alternativa progresista, preocupada con el crecimiento económico y que a su vez trabaje por generar condiciones para una mayor justicia social. Ese es el desafío y nosotros tenemos que actuar con responsabilidad para generarla", agregó. La opinión de los expertos De acuerdo al decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad Central, Marco Moreno, los comicios de este domingo en Argentina "no fueron una elección, fueron en los hechos un referéndum sobre la gestión de Macri y este lo perdió. Lo que importa de un gobierno son sus resultados, es la palabra que encumbra o hunde un gobierno". "Esta misma lógica aplica en el caso de Chile. Piñera empeñó su palabra cuando anunció su proyecto centrado en los 'tiempos mejores', palabra que el país evalúa por sus resultados. Estos, al igual que en el caso argentino, no se han concretado, y no hay mucho optimismo de que se puedan alcanzar", afirmó.
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En ese contexto, Moreno planteó que "no es que la oposición tenga asegurada una opción, pero se abre el juego -por los resultados adversos de Piñera- de que sean una el 2021. Hasta ahora no eran alternativa y todo parecía indicar que su posibilidad estaba cancelada, pero el resultado en Argentina muestra que la gente no se cierra a opciones". "La figura de Macri y la crisis de la economía significaron una mochila imposible de sobrellevar. Ese mismo escenario se podría dar en Chile de no ocurrir un cambio en las actuales condiciones. Este hecho va encender alarmas en La Moneda y Chile Vamos", subrayó. Un punto de vista distinto manifestó el cientista político y académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, quien coincidió en que "el principal socio de Piñera en la región ha sido precisamente Macri. Ambos derrotaron a gobiernos de centroizquierda en que la crítica principal estuvo orientada hacia la gestión económica". "Mientras en Argentina se ofreció el cambio, en Chile se ofertó los tiempos mejores, y en ninguno de los dos casos los electores han sentido que tales promesas han sido cumplidas. El indicador de aquello en el caso de Chile son los bajos niveles de aprobación presidencial, y en el caso de Argentina la votación de Macri en las primarias", expresó. En esa línea, Morales sostuvo que "lo que uno podría inferir es que en ambos países se ven debilitados para reelegir a presidentes del mismo color político", aunque detalló que la situación de la centroizquierda chilena no es similar a la unidad trasandina. "Sabemos que eso es inviable desde un punto de vista ideológico", expuso. "Es decir, la DC con el PC y el FA jamás van a convivir bajo el mismo techo. Lo que si pueden hacer es convivir bajo el mismo barrio, eso implica que existan dos coaliciones que estén coordinadas al momento de presentar a los candidatos (…) Juntos, pero no revueltos, esa es la estrategia que debiese seguir la centroizquierda en Chile".
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En cuanto a la figura que podría asimilarse a Alberto Fernández, Moreno señaló que "al abrirse el escenario se requiere llenar el actual vacío de liderazgo en la centroizquierda con un candidato que se mueva en clave de reformismo, gradualidad y sobre todo de moderación que es el nuevo activo electoral". "Un político con experiencia, que dedique más tiempo a escuchar que a confrontar, que promueva una política moderada que genere consensos, que genere mayorías. Quien mejor calza por ahora con ese perfil es el senador José Miguel Insulza. En tiempos de agitación, su moderación puede ser un activo electoral y político a considerar", comentó. Morales descartó que existan símiles chilenos a Fernández y recalcó que "en la actualidad no hay ninguno que sea capaz de unir a la centroizquierda desde la DC hasta el FA. Si existen liderazgos menores que son capaces de unir desde la DC hasta el PS o por otra parte, desde el PC hasta el FA. Pero una sola figura que abarque toda la centroizquierda no existe". "Por lo tanto, la única alternativa que queda es que exista una competencia entre dos coaliciones de centroizquierda que nunca van a convivir bajo un techo común, pero que si pueden convivir en el mismo barrio. Para eso, se requiere de un acuerdo electoral que tenga como misión derrotar a la derecha en el mayor número de comunas y regiones para luego enfrentar una presidencial a dos bandas", aseveró. Finalmente, el académico concluyó que "las situaciones de Argentina y Chile no son necesariamente comparables, porque las crisis son de distinta magnitud, el calendario electoral perjudica a Macri en comparación con Piñera, que tiene un año para revertir la situación y no existe una figura análoga capaz de unir a toda la centroizquierda en Chile". ¿Encontraste algún error? Avísanos
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