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Autor: La Tercera
En el clásico escocés, Ryan Kent golpeó al capitán de Celtic con un combo que entra directamente al historial de riñas memorables.
En el clásico de Escocia, uno de los más feroces del mundo, se vivió una situación que ya dio la vuelta al mundo: el jugador Ryan Kent, de Rangers, se vengó por las burlas de su rival, Scott Brown, y le dio un implacable puñetazo.
La escena trae a la memoria colectiva una serie de imágenes similares que difícilmente serán olvidadas por los fanáticos del fútbol.
Romario noquea a Simeone: el legendario exdelantero brasileño golpeó al argentino, en el duelo entre Sevilla y Barcelona, en 1994. “Insultó a mi madre y dijo que yo tenía sangre de cucaracha y no humana. Lo que diga ahora no me importa ni me extraña: es argentino”, dijo Romario tras el partido.
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Cuando Flavio Zandoná se hartó de Edmundo: en el duelo de vuelta de los octavos de final de la SuperCopa 1995, Vélez Sarsfield visitó a Flamengo, que tenía un equipo de ensueño, con el tridente Romario, Sávio y Edmundo. Éste último colmó la paciencia del marcador central de Vélez, Zandoná, quien lo golpeó por la espalda y desató una batalla campal en el Parque do Sabiá.
Candonga contra todos: el 27 de septiembre de 1998 es el día más recordado de la carrera futbolística de Juan Carreño. Las imágenes del exjugador de Huachipato, golpeando a medio equipo de Osorno, dieron la vuelta al mundo.
Un clásico en la lona: Colo Colo ganaba por 5-1 ante la U. de Chile en un partido amistoso, que de cordialidad no tuvo nada. Con la impotencia por el mal juego, Luis Musrri golpeó a Cristian Uribe. Tras esto, Ricardo Rojas golpeó en el rostro a Marco Villaseca, en una imagen que dejó su marca en el fútbol nacional.
Maradona y su desenfrenado útlimo partido con Barcelona: Athletic Club le ganó la final de la Copa del Rey de 1984 a Barcelona. Tras el pitazo final del partido, el Diego, cansado por los golpes recibidos, las emprendió contra Andoni Goicochea, y la batalla campal ensució la celebración.
El dirigente descontrolado: en la mismísima puerta de la Liga de Fútbol Profesional de España, el entonces presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, le propinó un tremendo puñetazo a José González Figalgo, gerente de Compostela. El hecho sucedió el 8 de marzo de 1996. (Ver 00.40).
La Batalla de Santiago
La Copa del Mundo de Chile 1962 dejó una postal imborrable para el fútbol nacional. Chile e Italia se midieron en el Estadio Nacional el 2 de junio, por la primera ronda del Grupo 2. Fue triunfo por 2-0 para los dirigidos por Fernando Riera. Sin embargo, el resultado quedó relegado a un segundo plano, más allá de su importancia. El duelo fue duro, y el clímax de la violencia se vivió en el minuto 38, cuando Leonel Sánchez fue derribado por Mario David, quien golpeó al chileno en el suelo. Sánchez se levantó y le dio un golpe con su puño izquierdo. Ninguno de los jugadores fue amonestado. Minutos después, David, con la rabia acumulada, golpeó a Leonel con una tremenda patada y fue expulsado.
