Critica a Morrissey por no querer premios, dice que no opina de rating y habla de la intensidad de esta versión.
"Este año ha sido tranquilo hasta por ahí, no más", dice sobre sus días como animadora del Festival. "Debió ser más tranquilo que 2011, pero en esta versión se hicieron concesiones por artistas como Luis Miguel, Marc Anthony o Morrissey, que generan imprevistos, que complican la situación. Ha sido intenso".
Habla de concesiones, ¿está de acuerdo que el Festival las haya hecho?
Depende. Hubo concesiones a artistas que yo no hubiese permitido. Como la entrega de premios, en el caso de Morrissey. No estuvo bien, porque es una tradición del Festival, la Antorcha tiene su historia, la competencia, y Morrissey no quiso premios ni que se le acercara nadie, lo prohibió. A mí me daba lo mismo acercarme a alguien así de intolerante, pero lo digo por el público, que pedió premios para él. Debió respetar nuestras tradiciones.
Pero él sólo hizo respetar un acuerdo al que se comprometió CHV: salir entre la 0 y 00.30 hora.
Sí, se pusieron varias reglas antes de traerlo, como la hora de salida. Pero las cosas se cambiaron a último minuto y se agregaron muchas más. Me dio pena, más que rabia, lo que pasó.
Morrissey tiene 30 años de carrera y es conocido por sus excentricidades. Por tanto, ¿no era parte de traerlo el acceder a lo que estipula en otros lados?
No lo creo. Chilevisión hizo ciertas concesiones, pero se multiplicaron. No fue un problema de la producción, sino de él. Tuvimos que sacar a Adamo, no sabes lo difícil que fue explicarles a los de la competencia folclórica que no saldrían. Pero se lo trajo en pos de un buen Festival, se hizo por el público, por tener a alguien de primer nivel.
Este Festival es el menos visto de los últimos 15 años, ¿a qué cree que obedece?
Yo conduzco, no me meto en eso. Te prometo que no tengo idea.
Usted es el rostro visible del evento, me imagino que le preocupa.
Viña es más que puntos de rating. Es una tradición, una maravilla. Sé que debe sustentarse económicamente, pero de eso se preocupan otras personas. He visto la Quinta llena todas las noches.
Pero este año tuvo una contraprogramación más fuerte.
Hay otras opciones, sí, pero el Festival es otra cosa.
Las tres estrellas del certamen cerraron este año sus respectivas noches pasada la una de la madrugada. ¿Comparte ese criterio?
Sí, porque mantiene el suspenso, aunque se trata de una decisión editorial.
Usted y Araneda tuvieron menos exposición mediática este año, ¿le pareció más cómodo así?
Antes del Festival hice varias giras de radio, dando entrevistas, estuve en la tallarinata, en un montón de partes. Pero no puedo tener una cámara las 24 horas. No soy así, no me acomoda.
Mañana parte animando el nuevo matinal. Es un training fuerte.
Sí, estoy muy ilusionada. Ayer el director del matinal vino a hacer una suerte de reunión de pauta a Viña. Espero que la gente lo pase muy bien con lo que vamos a hacer.
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